Por encargo de la Fundación Photographic Social Vision, la periodista Wayra Ficapal ha elaborado el informe “Festivales de fotografía en Cataluña: estado de la cuestión y propuestas de mejora”. Este estudio hace una radiografía actualizada del sector de los festivales de fotografía en Cataluña para propiciar la debida reflexión al respecto y las acciones y cambios necesarios para el ejercicio de buenas prácticas profesionales y la erradicación de la precariedad.
“Teniendo en cuenta que la principal medida para hacer frente a la desinformación visual es la educación, es decir, preparar a la ciudadanía para una mayor actitud crítica hacia las imágenes, los festivales de fotografía en Cataluña se posicionan como una oferta cultural de interés creciente. En un espacio-tiempo concentrado, ofrecen acceso a contenidos culturales, sensibilización y educación visual, y estudio y difusión del patrimonio fotográfico, tanto catalán como internacional. Además, ante la crisis de los medios de comunicación tradicionales, muchos fotógrafos han encontrado en los festivales de fotografía un espacio donde poder exponer su trabajo y hacerla accesible a un público extenso. A pesar de todo este contexto favorable, estos acontecimientos a menudo están afectados por una problemática que se extiende por todo el sector de la cultura: la precariedad”, escribe Wayra Ficapal en el informe.
Cifras destacadas del estudio
En Cataluña hay 35 festivales de fotografía en activo, la mayoría de pequeño y medio formato, de géneros diversos como fotografía social, de natura, de ornitología, de bodas, de fotografía contemporánea, emergente, analógica, experimental, festivales de pensamiento y artes visuales y festivales con perspectiva transfeminista. El 89% de festivales de Cataluña nació después del vacío generado por la desaparición del festival bienal Primavera Fotogràfica, en 2004. Consulta aquí la lista completa de festivales de fotografía de Cataluña.
El modelo catalán de país centralizado se reproduce en los festivales, puesto que el 59% se sitúa en la provincia de Barcelona, el 24% en la de Girona, el 12% en Tarragona y el 6% en Lleida. A nivel de calendario, en Cataluña hay festivales de fotografía activos durante todo el año, ahora bien, el 33% se inauguran en octubre, el 15% en noviembre y el 9% en septiembre, lo que supone que el 57% de los festivales se concentran en estos tres meses. El 59% de los 17 festivales que respondieron la encuesta para este informe afirman que el calendario de subvenciones públicas y la firma de contratos o colaboraciones con la administración pública es un hecho “muy determinante” a la hora de agendar las actividades del festival que dirigen, mientras que un 24% asegura que es “un poco determinante”.
En referencia a la remuneración económica de los directores y directoras de los festivales, sólo un 41% asegura recibir una remuneración justa, mientras que un 59% afirma que le resulta insuficiente o que no cobra.
En cuanto al presupuesto, más de la mitad de los 17 festivales que respondieron la encuesta (el 53%) tienen un presupuesto que va de los 40.000 a los 150.000 euros, un 41% no supera los 25.000 euros, mientras que un 6% supera los 150.000 euros. Las fuentes de financiación de los festivales ponen de relieve la complejidad administrativa del país: un 94% reciben financiación pública proveniente de ayuntamientos, un 71% de diputaciones, un 77% de la Generalitat de Catalunya, y un 24% del Ministerio de Cultura del Estado. Ningún festival recibe ayudas públicas de la Unión Europea. Los festivales tienen también otras fuentes de financiación como el patrocinio privado, venta de entradas, merchandising, visitas guiadas…
Remuneración de los fotógrafos y otras cuestiones fundamentales
En cuanto a la remuneración del artista por el trabajo o los servicios prestados a los festivales, un 75% de los 75 fotógrafos y fotógrafas que contestaron la encuesta asegura que ha recibido propuestas de participación en festivales en los que no había honorarios asignados por derechos de autor o servicios solicitados. Solo un 9% de los artistas aseguran haber recibido una remuneración económica justa, un 26% la ha recibido de forma simbólica, un 30% la ha recibido de forma excepcional y un 35% directamente no ha cobrado por el trabajo. |